Porque a veces la llevas pero no siempre; sería demasiado aburrido.
Ese es el juego: cazador-cazado, pillador-pillado, salvador-salvado. Algo así.
Ahora te toca esconderte.
Está contando en voz alta, hacia atrás, diez, nueve y el resto de números. Ya sabes cómo va eso, que si ocho, que si siete, pero tiemblas. Tiemblas por si sale mal, no el juego en sí sino tu juego.
Es sencillo y nunca lo es. Las reglas son claras pero ganar no siempre es ganar, sobre todo si lo único que quieres es que te encuentre. Y te entra el miedo de haberte escondido demasiado bien.
Cinco, cuatro, tres.
Siempre es el tres, ¿verdad?
Eres grande, lo sabes. Eres mucho más grande que esa farola. ¿Podrías ser más obvio? Aunque es normal si tenemos en cuenta que ni siquiera querías jugar.
Las cosas que hacemos por amor.
Dos, uno.
Sigma ft. Birdy – Find me
If you’re ready, heart is open, I’ll be waiting, come and find me.