¿Qué sientes?
Siento que odiamos la rutina pero que cuando tenemos ocasión de abandonarla nos cagamos. Siento miedo, mucho miedo. Siento que estoy a punto de dar un paso que me va a cambiar la vida. Es solo un paso, de esos que damos a miles sin que signifiquen nada, pero este es diferente; es un paso que en cierto modo cruza una línea, y una vez esté al otro lado no habrá vuelta atrás.
Siento que voy a cambiar una rutina por otra, que una vez que me establezca en esa nueva volveré a estar cómodo y será como si nada hubiera pasado, pero que hasta entonces este vacío no se va a ir. Sabes a qué me refiero, a esa sensación de estar constantemente cayendo a pesar de estar quieto. Ese tipo de vacío.
Siento que echo de menos. Se supone que uno echa de menos cuando ya no tiene, pero siento que ya estoy echando de menos, aunque siga aquí y haya tiempo. Seguramente sea estúpido y tendría que estar aprovechando este tiempo que me queda para hacer eso que siempre quise hacer, para decir esas cosas que nunca dije, pero ¿sabes? creo que todo eso son chorradas. Lo que me sale ahora es echar de menos, echar de menos a esta rutina que tantas veces he criticado y que ahora me acojona dejar ir.
Y por encima de todo siento que sigo hablando porque no quiero decirte adiós, porque sé que este es ese último momento, que cuando nos despidamos descubriré que estoy justo detrás de la línea y… mierda, ¿tú también puedes verla?
Siento que ha merecido la pena, que no solo los libros largos son buenos y que el nuestro ha sido una obra maestra. Gracias por dejar que me escribieran a tu lado.
Glen Hansard – Leave
Let go of my hand, you said what you have to, now leave.
Pues como tus entradas yo me las suelo hacer un poco mías de esta te cojo la pregunta.
Y que quieres que te diga, pues que después de leerte lo que siento ahora mismo son un montón de ganas de tenerte delante y de preguntarte por si quieres explicarme de lo que va la entrada y darte un abrazo sacude miedos, porque si puede ser que echemos de menos cuando ya no tenemos y yo mucho no es que te tenga y lo mismo te parece de locos pero oye, lo que se te echa de menos!!!
Muy ñoño todo, lo sé… podría decir que son estos malditos virus y esta tos de perro pulgoso que se niegan a irse y me tienen medio trastornada pero la verdad es que yo soy así jajajaja y es lo que hay y esto es lo que me salia decirte hoy.
Así que… me voy a meter en la cama que hoy la menda no da pa’ más. 😊
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😀 ¡Te mando un abrazo que extermina virus! Buenos días.
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Buenos días!!! 😊😊😊
Me va a sentar taaaaaaan bien tú abrazo… 😁
Vamos a por el viernes!!!
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¡A por él! 😉
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Esos momentos son claves si no dejas q el miedo te pare; se q no lo hará.
Siente; no pasa nada por sentir y sigue siempre compartiendonos aquello q sientas y quieras transmitir
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Supongo que no está mal sentir miedo, siempre que como tú dices no dejemos que nos pare.
Muchas gracias como siempre por tus palabras 🙂 ¡Una brazo!
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Besitos, Ztita. Estoy agotada. Bien, pero cansada.
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Si estás bien imagino que el cansancio es un efecto secundario de algo bueno, así que me alegro 🙂 ¡Un abrazo y a descansar!
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Sí, estos días entre el hospital y la casa de mi niño me han mata’o. Pero estamos bien. Voy a descansar.
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:O ¿Hospital? ¿Todo bien seguro?
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La operación de mi niño… de su espalda… Todo está bien. En perfecto orden. Besos.
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Desde el otro lado del charco os mando todo mi cariño. Besos.
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Gracias, mi amor. Sé que es todo el cariño del mundo envuelto en un rollito. Te quiero.
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Nos contaron demasiados cuentos sobre la eternidad, parece que sólo las vidas largas y los grandes amores que perduran son válidos y nada más lejos. Hay relatos breves que te atrapan, como me pasa a mí contigo. Hay amores eternos que perdieron brillo por el camino. Y hay obras maestras que te cambian la vida en lo que desde fuera parece sólo un suspiro. El miedo no es malo, si sabemos domesticarlo. Respira, y echa de menos, si es lo que necesitas para avanzar. Echar de menos puede traducirse también en un homenaje. Un abrazo valiente y salta esa línea!
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¿Y si comparto contigo un secreto y te digo que la entrada está basada en hechos reales pero no en mis hechos reales? Al menos no del todo. En este caso yo era el que hacía la pregunta. La respuesta no fue esa, no así, pero me sirvió de inspiración. No era yo el que tenía que saltar la línea, ni yo de quien no se quería despedir, pero me llevé todo eso a otro plano y aquí estamos. Aquí creo que sí soy yo el que respondo, no pensando en nada concreto sino en la vida como concepto, y me gusta tu consejo, tu ver ese echar de menos como homenaje.
Y me gusta sin duda eso de que mis relatos te atrapen. Eso me hace sentir muy bien.
¡Un abrazo!
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Prefiero arrepentirme de cambiar de rutina que de no cambiarla, al final hay que probar para saber si lo que viene es mejor… Pero eso si, quiero que siempre estés tú por ahi rondando en mis rutinas, por mucho que cambien, ¿trato hecho? 🙂
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Ah, y temazo!!!!!!!
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Qué bonito, ¡claro que sí! ¡Trato hecho! 🙂
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