Dangerous night

Que a veces el mundo desaparece y ahora es una de esas veces,
que no hay nadie,
tú y yo.

Tú y yo, y si me descuido solo tú,
que uno a sí mismo se mira poco
y cómo si tú eres la alternativa.

Volamos en círculos,
aunque supongo que da igual la trayectoria.
¡Volamos!

Vuelo.
No hago otra cosa desde que te conozco.

Está el parque lleno de gente que no veo,
que no hay mundo,
pero me escondo detrás de una espalda
para ver si te das cuenta,
si me echas de menos,
si vienes a buscarme.

Entonces los veo.

Se miran. Se tocan. Se besan.
Sonríen.

Vuelo a por ti: qué más da quién busca a quién.
Quiero eso.
Mirarte. Tocarte. Besarte.
Sonreír.

Qué más da que no podamos.

Quiero volar a tu lado.

 

Thirty Seconds to Mars – Dangerous night

What a dangerous night to fall in love.

Arde

Somos muy visuales. Demasiado.
Si no lo veo no es real, decía alguien que conocí.
Si a algo no podemos ponerle un like no existe (esto lo he dicho yo).
Pero no a todo se le puede poner un me gusta. Todavía no.
No todo se ve.

Si yo enciendo una vela y salgo de la habitación, ¿se apaga? No lo sé, porque me he ido, pero lo normal es que no. No la veo, pero la llama sigue ahí. Un poco como nosotros. Como nosotros.
Mucho.

Si enciendo una vela no debería salir de la habitación: jamás dejes una vela desatendida.
Y ¿qué hice yo contigo sabiendo que eras fuego?
Desatenderte.

Ardíamos y ardimos, y supongo que todavía ardemos, y qué peligro tanto fuego.

Sigo soñando, ¿sabes? Aunque no te diga nada. Aunque no escriba.
Sigo soñando contigo.

 

Aitana – Arde

Y no, no queréis. No lo veis.

Love is a verb

Decimos que nos echamos de menos,
que tenemos ganas de vernos,
y cuando estamos juntos pasamos la mayor parte del tiempo con los ojos cerrados.

Supongo que es verdad eso,
que no siempre se ve con los ojos.
O que estamos usando el verbo que no es.

 

John Mayer – Love is a verb

So you gotta show, show, show me.