He soñado con la infinita belleza de un gesto tan insignificante como sostener una mano. Insignificante, ya… que se lo digan a los Beatles.
Sin ser consciente del hecho de irme, cada vez que vuelvo es como si llegara un vendaval que abre de golpe centenares de puertas; puertas que no sé que existen hasta que las tengo enfrente, de par en par, invitándome a mirar al otro lado. Y al otro lado hay… diría magia, pero no sé si es esa la palabra que busco realmente. En un principio siento que lo que hay ahí es eso que necesito para encontrarme, pero cuando despierto, porque las puertas siempre se abren en sueños, suelo estar desconcertado, con la sensación de haberme perdido un poco más, de haber dado otro pequeño paso hacia ese lugar incierto que algunos llaman destino.
Esta noche, mientras te miraba fijamente a los ojos, he sostenido tu mano, no como una parte de tu cuerpo, sino como símbolo de ese todo que una vez soñé que seríamos.
T. V. Carpio – I want to hold your hand
When I say that something I wanna hold your hand.